saludo, _m._, salute, bow, greeting.
Yo te saludo al paso de mi _steamer_,
prosternándome delante de tu majestad.
à los treinta ó cuarenta pasos observo que está la niña
asomada, y me paro y le envÃo una sonrisa y un saludo ceremonioso.
Recogà el sombrero, me lo puse, y volvà á alzar la cabeza y á remitir
otra sonrisa, acompañada esta vez de un ligero saludo.
Del último asilo,
Obscure y estrecho,
Abrió la piqueta
El nicho á un extremo.[4]
Allà la acostaron,
Tapiáronle luego,
Y con un saludo
Despidióse el duelo.
Sus camaradas, afectando la mayor gravedad, respondieron á la invitación
con un cómico saludo, y se encaminaron á la capilla mayor precedidos del
héroe de la fiesta, que al llegar á la escalinata se detuvo un
instante, y extendiendo la mano en dirección al sitio que ocupaba la
tumba, les dijo con la finura más exquisita:
--Tengo el placer de presentaros á la dama de mis pensamientos.
Mientras esto decÃa el montero, Constanza, que asà se llamaba la
hermosa hija de don DionÃs, se habÃa aproximado al grupo de los
cazadores, y como demostrase su curiosidad por conocer la
extraordinaria historia de Esteban, uno de éstos se adelantó hasta el
sitio en donde el zagal daba de beber á su ganado, y le condujo á
presencia de su señor, que para disipar la turbación y el visible
encogimiento del pobre mozo, se apresuro á saludarle por su nombre,
acompañando el saludo con una bondadosa sonrisa.
=saludo,= salutation, bow.
=saludo=, _m._, salutation.
=saludo=, _m._, greeting, salutation.
22 Yo Tercio, que escribà la epÃstola, os saludo en el Señor.
241.]
Al notar la precipitación con que todos hicieron el ademán de
inclinarse, una imperceptible sonrisa de vanidad satisfecha asomó á
los labios de la orgullosa doña Inés, que después de hacer un saludo
general á los galanes que tanto empeño mostraban en servirla, sin
mirar apenas y con la mirada alta y desdeñosa, tendió la mano para
recoger el guante en la dirección que se encontraban Lope y Alonso,
los primeros que parecÃan haber llegado al sitio en que cayera.[1] En
efecto, ambos jóvenes habÃan visto caer el guante cerca de sus pies;
ambos se habÃan inclinado con igual presteza á recogerle,[2] y al
incorporarse cada cual le[2] tenÃa asido por un extremo.
Pues ese es el padre en cuestión;
mirad como la gente del pueblo le abre paso y le saluda.
Constanza conoció el efecto que su burla habÃa producido en el
enamorado joven; pero deseando apurar su paciencia hasta lo último,
tornó á decir en el mismo tono:
--¿Y si al dispararla te saluda con alguna risa del género de la que
oyó Esteban, ó se te rÃe en la nariz, y al escuchar sus sobrenaturales
carcajadas se te cae la ballesta de las manos, y antes de reponerte
del susto ya ha desaparecido la corza blanca más ligera que un
relámpago?
Os saludan todas las
iglesias de Cristo.
Frente al balcón, vestido de rosas blancas, por donde en el
ParaÃso asoma tu faz de generosos y profundos ojos, pasan tus hermanas y
te saludan con una sonrisa, en la maravilla de tu virtud, ¡oh, mi ángel
consolador; oh, mi esposa!
21 Os saludan Timoteo, mi coadjutor, y Lucio y Jasón y Sosipater, mis
parientes.
Buenos Aires
saludaba en su rostro bronceado,--como comenzado ya a convertirse en
estatua,--el reflejo de los grandes dÃas de la patria.
Pasamos por un pasadizo sombrÃo;
y, de pronto, en un cuarto lleno de luz, me encontré entre los brazos[1]
de un hombre pequeño de cuerpo,[2] rostro de iluminado, voz dulce y
dominadora al mismo tiempo y que me decÃa esta única palabra: «¡Hijo!»
Era la hora ya de aparecer ante el público, y me dijo que yo debÃa
acompañarle en la mesa directiva[3]; y cuando me dà cuenta,[4] después
de una rápida presentación a algunas personas, me encontré con ellas y
con Martà en un estrado, frente al numeroso público que saludaba con un
aplauso simpático.
Buenos Aires
saludaba en su rostro bronceado,--como comenzado ya a convertirse en
estatua,--el reflejo de los grandes dÃas de la patria.
Pasamos por un pasadizo sombrÃo;
y, de pronto, en un cuarto lleno de luz, me encontré entre los brazos[1]
de un hombre pequeño de cuerpo,[2] rostro de iluminado, voz dulce y
dominadora al mismo tiempo y que me decÃa esta única palabra: «¡Hijo!»
Era la hora ya de aparecer ante el público, y me dijo que yo debÃa
acompañarle en la mesa directiva[3]; y cuando me dà cuenta,[4] después
de una rápida presentación a algunas personas, me encontré con ellas y
con Martà en un estrado, frente al numeroso público que saludaba con un
aplauso simpático.
No
contestó á los hermanos que al pasar le saludaban, y se encerró en su
celda de golpe y porrazo.
El sacerdote que oficiaba sentÃa temblar sus manos, porque Aquél que
levantaba en ellas, Aquél á quien saludaban hombres y arcángeles era
su Dios; era su Dios, y le parecÃa haber visto abrirse los cielos y
trasfigurarse la Hostia.[1]
[Footnote 1: trasfigurarse la Hostia.
Mi tÃa, á la
que no veÃa desde niño, me fué al pronto repulsiva, por más que se
mostrara desde luego cariñosa y tolerante conmigo; el pueblo me pareció
triste, á pesar de sus jardines y de las pintorescas casitas que hay en
él; sus habitantes poco simpáticos, aunque todos me saludaban con
afecto.
of_ =saltar=
=saludar= to greet, salute
=saludó= _3 sing.
Cuando llegó
al fin del mundo vio a la madre del viento del Norte y la
saludó.
Una nueva y aun más ruidosa carcajada de los oficiales saludó esta
original revelación del estrambótico enamorado de la dama de piedra.
Una nueva y aún más ruidosa carcajada de los oficiales saludó esta
original revelación del estrambótico enamorado de la dama de piedra.
--¡Ola, amigo!--saludó el primero.--¿Quiere Vd.
--Está a mi lado y me encarga te salude.
--Está a mi lado y me encarga te salude.
Pues ese es el padre en cuestión;
mirad como la gente del pueblo le abre paso y le saluda.
Constanza conoció el efecto que su burla habÃa producido en el
enamorado joven; pero deseando apurar su paciencia hasta lo último,
tornó á decir en el mismo tono:
--¿Y si al dispararla te saluda con alguna risa del género de la que
oyó Esteban, ó se te rÃe en la nariz, y al escuchar sus sobrenaturales
carcajadas se te cae la ballesta de las manos, y antes de reponerte
del susto ya ha desaparecido la corza blanca más ligera que un
relámpago?
--Está a mi lado y me encarga te salude.