grito de ...
grito, _m._, cry; -- de vela, watch-cry.
vela, _f._, watch, vigil; candle; grito de --, watch-cry.
Neira lanza un grito de angustia y cae al
suelo abrazado con su enemigo.
Al fin abrió los ojos, tendió una mirada, y un grito agudo se escapó de
sus labios.
Al fin abrió los ojos, tendió una mirada, y un grito agudo se escapó
de sus labios.
Oir Alvar este grito, exhalar otro de sorpresa y alegrÃa, y lanzarse á
la calle, todo fué uno.
Tuve al fin que dejarlo andar a su gusto, estimulándolo de vez en cuando
con el grito de ¡buey!
Un grito general de sorpresa se escapó del auditorio, que permaneció
por un instante herido de un inconcebible estupor.
Oà un quejido, un grito de rabia, y và salir[6] en seguida
el oso de entre la humareda, dando tumbos[91] a
un lado y a otro.
exclama
con un grito de alegrÃa el cazador, volviendo á hundir por la
centésima vez el acicate en el sangriento ijar de su caballo; ¡muerto
está!
Extendida en el patio la grande y aterciopelada piel, las mujeres
reprimieron un grito; mas al rodar la cabeza sobre la grama no pudieron
contenerse.
Pablo entró con alguna dificultad en aquel espesar, y no pudo contener
un grito de asombro, de admiración, tal vez de remordimiento; porque
allà estaba Tony...
Al propio tiempo _Heredia_ fijó en él sus ojos; y dando un grito y un
salto como si le hubiese picado una vÃbora, arrancó á correr hacia la
calle de San Jerónimo.
Fernando lanzó un grito extraño y se dejó caer de rodillas ocultando el
rostro con las manos; yo cerré los ojos, dà algunos pasos y tropecé con
la puerta de la alcoba.
HIMNO NACIONAL DE MÉJICO
JAIME NUÑÓ
Mejicanos al grito de guerra
El acero aprestad y el bridón;
Y retiemble en sus centros la tierra
Al sonoro rugir del cañón.
El joven ni oyó siquiera las palabras de sus amigos, y tambaleando y
como pudo llegó á la tumba y aproximbe á la estatua; pero al tenderle
los brazos resonó un grito de horror en el templo.
Las sienes le latieron con una violencia
espantosa; una nube de sangre obscureció sus pupilas, arrojó un segundo
grito, un grito desgarrador y sobrehumano, y cayó desvanecido sobre el
ara.
Las sienes le latieron con una violencia
espantosa; una nube de sangre obscureció sus pupilas, arrojó un
segundo grito, un grito desgarrador y sobrehumano, y cayó desvanecido
sobre el ara.
El pueblo de Buenos Aires lanzó el 25 de mayo de 1810 15
el grito de independencia, siendo jefes del movimiento
los generales San MartÃn y Belgrano y el Almirante
Brown.
El joven ni oyó siquiera las palabras de sus amigos, y tambaleando y
como pudo llegó á la tumba, y aproximóse á la estatua; pero al tenderle
los brazos, resonó un grito de horror en el templo.
Uno de ellos, no
el que venÃa delante, sino otro, extendió el brazo por encima del hombro
del primero y me agarró de las narices y me dió un fuerte tirón que me
hizo lanzar un grito de dolor.
Comenzó la Misa, y prosiguió sin que ocurriese nada de notable hasta
que llegó la consagración.[1] En aquel momento sonó el órgano, y al
mismo tiempo que el órgano un grito de la hija de maese Pérez....
Es el mismo burlos de la Luisiana, la tenca de Chile, el
_cenzonte_ o sinsonte de Méjico; nombres todos alusivos a la facultad
que posee este pájaro de imitar el canto de las demás aves, y aún el
grito de algunos cuadrúpedos.
El ángel miró tristemente y durante largo tiempo aquel pobre y
abandonado sitio; pero de repente su celeste mirada fué á posarse en una
florecita azul que un rayo de sol habÃa abierto y que parecÃa sonreir á
la tierra: el ángel dejó oir un grito de alegrÃa: abatió su vuelo y fué
á cogerla.
Por hacerme partÃcipe de sus costumbres estas
pobres gentes,{174-1} hasta me despierta á mà al mismo tiempo que á
ellas el penetrante é intraducible grito de _¡apuyááá!_{175-1} con que
les llama, á las tres de la mañana en verano y á las cinco en invierno,
para ir á la mar, otro marinero que tiene por esta obligación algunos
gajes.
Garcés le
encaró la ballesta; pero en el mismo punto en que iba á herirla, la
corza se volvió hacia el montero, y con voz clara y aguda detuvo su
acción con un grito, diciendole:--Garcés ¿qué haces?--El joven
vaciló, y después de un instante de duda, dejó caer al suelo el arma,
espantado á la sola idea de haber podido herir á su amante.
Ya de pie, y cerciorándose á tientas de que el arma estaba preparada,
dió un paso hacia adelante, alargó el cuello por cima de los arbustos
para dominar el remanso, y tendió la ballesta; pero en el mismo punto
en que, á par de la ballesta, tendió la vista buscando el objeto que
habÃa de herir, se escapó de sus labios un imperceptible é
involuntario grito de asombro.
Al verlos
inmóviles, desafiándose en silencio con la mirada, y decididos ambos á
no abandonar el guante que acababan de levantar del suelo, la dama
dejó escapar un grito leve é involuntario, que ahogó el murmullo de
los asombrados espectadores, los cuales presentÃan una escena
borrascosa, que en el alcázar y en presencia del rey podrÃa
calificarse de un horrible desacato.
condenado engendro de Satanás, dijo éste con voz espantosa,
recogiendo la ballesta con una rapidez indecible: pronto has cantado
la victoria, pronto te has creÃdo fuera de mi alcance; y esto
diciendo, dejó volar la saeta, que partió silbando y fue á perderse en
la obscuridad del soto, en el fondo del cual sonó al mismo tiempo un
grito, al que siguieron después unos gemidos sofocados.
Hallándose el tÃo Traga-santos en esta santa ocupación, asomaron por los
caminos de Cabezudo y Barbaruelo numerosas turbas de masas populares que
se dirigÃan hacia Animalejos al furibundo grito de: «¡Muera el tÃo
Traga-santos!», grito que no tardó en encontrar eco en Animalejos mismo,
cuya plebe empezó á agitarse furiosa, formando cuerpo con la forastera:
toda aquella muchedumbre se encaminó, rugiendo de furor, al cerrillo de
San Isidro.
Las
silenciosas calles de Toledo[3] resonaban noche y dÃa con el marcial
rumor de los atabales y los clarines, y ya en la morisca puerta de
Visagra,[4] ya en la del Cambrón,[5] en la embocadura del antiguo
puente de San MartÃn,[6] no pasaba hora sin que se oyese el ronco
grito de los centinelas, anunciando la llegada de algún caballero que,
precedido de su pendón señorial y seguido de jinetes y peones, venÃa á
reunirse al grueso del ejército castellano.
El memorable grito de independencia lanzado en Dolores[3] el 16 de
Septiembre de 1810 por los primeros patriotas mejicanos encabezados por
Hidalgo, cura del pueblo, no pudo dejar de[4] encontrar simpático eco en
el corazón de Morelos; asà fué que[5] cuando en el mes siguiente llegó
Hidalgo a Valladolid, al frente de un ejército patriota, y se apoderó
sin resistencia de la ciudad, Morelos fué uno de los primeros en ponerse
a su lado y pedirle un puesto en que sacrificarse por la libertad de su
patria.
Son de notarse[54] los rasgos descriptivos que el poeta
ecuatoriano da de BolÃvar, con quien se encuentra antes de empezar la
batalla; la descripción de la pelea entre los dos ejércitos, la cual
trasporta al lector al campo de los combatientes, donde ve a cada
guerrero a la cabeza de los bravos que le han recomendado, embistiendo,
cargando, arrollando, distinguiéndose cada cual en la lid según su valor
y ardimiento,--donde oye el silbido de las balas, el estridor de los
aceros, el grito de los que luchan, el alarido de los que caen, el
atambor que redobla, el clamor de la trompeta que excita a la pelea, y
el relincho de los fogosos corceles--, y ve sangre a torrentes[55] y
montones de cadáveres por donde quiera que vuelve los ojos.
Luego, poco á poco fué cesando el ruido y la animación; los vidrios de
colores de las altas ojivas del palacio dejaron de brillar; atravesó
por entre los apiñados grupos la última cabalgata; la gente del pueblo
á su vez comenzó á dispersarse en todas direcciones, perdiéndose entre
las sombras del enmarañado laberinto de calles obscuras, estrechas y
torcidas,[1] y ya no turbaba el profundo silencio de la noche más que
el grito lejano de vela de algún guerrero, el rumor de los pasos de
algún curioso que se retiraba el último, ó el ruido que producÃan las
aldabas de algunas puertas al cerrarse, cuando en lo alto de la
escalinata que conducÃa á la plataforma del palacio apareció un
caballero, el cual, después de tender la vista por todos lados como
buscando á alguien que debÃa esperarle, descendió lentamente hasta la
cuesta del alcázar, por la que se dirigie hacia el Zocodover.
=grito=, _m._, shout.
=grito,= cry, scream, call, shouting.
=grito=, _m._, shout, cry; =á gritos=, at the top of one's voice.
101, note 2.]
El órgano proseguÃa sonando; pero sus voces se apagaban gradualmente,
como una voz que se pierde de eco en eco, y se aleja, y se debilita al
alejarse, cuando de pronto sonó un grito en la tribuna, un grito
desgarrador, agudo, un grito de mujer.
El Sol se irrita al ver su poder menospreciado
y grita que se cambiarÃa por la nube.
bruja!--grita al oÃr estas palabras, descompuesta y
febril, la mujer del Tuerto.--¿Yo borracha?
Será a causa de esto que es fácil entender «una ballena,»
cuando se grita, «una va llena,» ¿no le parece?
y yo te voy á abrir en
canal!--grita exasperado el Tuerto al notar la turbación, cada vez más
visible, de su mujer.--à ver el dinero, digo, ¡pronto!
El uno corre de entusiasmo ciego,
La niña arrulla á su muñeca inerme,
Y mientras grita el uno: Fuego, Fuego,
La otra murmura triste: Duerme, Duerme.
De noche en las casas (pues se domestica
fácilmente) y en el campo grita asimismo descompasadamente, apenas
siente algún rumor o advierte una novedad que le causa extrañeza.
El vendedor de
periódicos, rosado y risueño, salta como un gorrión, de tranvÃa en
tranvÃa, y grita al pasajero _¡intanrsooonwoood!_, lo que quiere decir,
si gustáis comprar cualquiera de esos tres diarios, el _Evening
Telegram_, _el Sun_ o el _World_.
Su nuera aparece en el suyo, más
desaliñada que nunca, con la cara roja como un pimiento seco y con la
crin suelta, en medio de una espesÃsima nube de humo, ¡aparición
verdaderamente infernal!; saca medio cuerpo fuera de la balaustrada, y
con voz ronca y destemplada grita, mirando al piso segundo:
--¡TÃa!...
of_ =gastar=
=generosamente= generously
=generoso= noble, generous
=gente= _f._ people
=gobernador= _m._ governor
=golpe= _m._ blow;
=de un golpe= at one blow
=golpear= to strike, hit, hammer
=Gómez= _m._ name of man
=gordo= fat
=gota= _f._ drop
=gracia= _f._ grace;
_pl._ thanks
=gran= _see_ grande
=grande= great, large;
_m._ =grandee=
=gris= gray
=grita= _3 sing.
--Uno me falta,--grita hecho un solimán.
--¡Niñas, por Dios!--grita su madre.--TodavÃa no es tiempo.
--Grita, grita más alto; que te lo oiga el tu marido que por allá abajo
asoma, y mira después onde te metes.
--¿Cómo?--grita la señora.--Un animalito que no pasa de los seis años,
¿va á pagar billete entero, como si fuese una persona mayor?
En su fabulosa Babel, gritan, mugen, resuenan, braman, conmueven la
Bolsa, la locomotora, la fragua, el banco, la imprenta, el dock y la
urna electoral.
gritaba, alborozado con el
buen éxito de su delicada travesura.
Y enarbolando el bastón, empezó á medir las costillas al tabernero, que
gritaba:
--¡Socorro!
gritaba la condesa en su horrible pesadilla,
señalando á sus servidores la zarza en que se habÃa escondido el
asqueroso reptil.
Una apiñada multitud de gente de pueblo se revolvÃa, gritaba, lloraba é
invadÃa la última rampa, á cuyo extremo estaba atracada una lancha.
Un dÃa en que el padre trabajaba muy afanoso con
otros varios hombres en sus tierras de labranza, oyó
que el pastorcillo gritaba: 10
--¡El lobo!
Aquella muchedumbre gritaba tanto, que más
no podÃa ser.[1] En los andenes se movÃan pesadamente los _huasos_ con
mantas de vivos colores, zapatos de taco alto, haciendo resonar las
espuelas de ancha rodaja.
--¡Socorro, socorro!--gritaba....
--¡à tierra, muchachos!--gritaba nuestro patrón.--Vamos á embarrancar.
gritaba, alborozado con el
buen éxito de su delicada travesura.
Y enarbolando el bastón, empezó á medir las costillas al tabernero, que
gritaba:
--¡Socorro!
gritaba la condesa en su horrible pesadilla,
señalando á sus servidores la zarza en que se habÃa escondido el
asqueroso reptil.
Una apiñada multitud de gente de pueblo se revolvÃa, gritaba, lloraba é
invadÃa la última rampa, á cuyo extremo estaba atracada una lancha.
Un dÃa en que el padre trabajaba muy afanoso con
otros varios hombres en sus tierras de labranza, oyó
que el pastorcillo gritaba: 10
--¡El lobo!
Aquella muchedumbre gritaba tanto, que más
no podÃa ser.[1] En los andenes se movÃan pesadamente los _huasos_ con
mantas de vivos colores, zapatos de taco alto, haciendo resonar las
espuelas de ancha rodaja.
--¡Socorro, socorro!--gritaba....
--¡à tierra, muchachos!--gritaba nuestro patrón.--Vamos á embarrancar.
Y los chicos, menos disimulados que las personas mayores, le gritaban al
nuevo pescador:
--¡Pescador de caña, más pierde que gana!
Y no sólo gritaban como unos locos,[10] sino
que también gesticulaban y accionaban como si estuvieran por darse de
bofetadas.[11]
--_Julián Martel_, nom de plume of _José Miró_ (ARGENTINO)
Chapter Footnotes:
[1] =De todos los sitios en que ...
En la esfera tenebrosa que rodeaba
su mente, no habÃa sino pavos haciendo _clau clau_; pollos que gritaban
_pÃo pÃo_; montes de turrón que llegaban al cielo formando un Guadarrama
de almendras;{65-3} nacimientos llenos de luces y que tenÃan lo menos
cincuenta mil millones de figuras; ramos de dulce; árboles cargados de
cuantos juguetes puede idear la más fecunda imaginación tirolesa; el
estanque del Retiro lleno de sopa de almendras; besugos que miraban á
las cocineras con sus ojos cuajados; naranjas que llovÃan del cielo,
cayendo en más abundancia que las gotas de agua en dÃa de temporal, y
otros mil prodigios que no tienen número ni medida.
¿Qué gritaban los chicos?
--¡El mundo al revés!--gritaban en tono de mofa.
con la palma de la mano, y un
grupo de cinco ó seis hombres me tapó al mismo tiempo la
puerta.--¡Socorro!--grité con voz apagada, retrocediendo de nuevo hacia
la pared.
Dijo el cuervo: «¡Nunca más!»
«Eh, profeta--dije--o duende,
mas profeta al fin, ya seas
ave o diablo--ya te envÃe
la tormenta, ya te veas
por los ábregos barrido a esta playa,
desolado
pero intrépido a este hogar
por los males devastado,
dime, dime, te lo imploro:
¿Llegaré jamás a hallar
algún bálsamo o consuelo para el mal que triste lloro?»
Dijo el cuervo: «¡Nunca más!»
«Oh, profeta--dije--o diablo--Por ese ancho combo velo
de zafir que nos cobija, por el mismo Dios del Cielo
a quien ambos adoramos, dile a esta alma adolorida,
presa infausta del pesar,
si jamás en otra vida la doncella arrobadora
a mi seno he de estrechar,
la alma virgen a quien llaman los arcángeles Leonora!»
Dijo el cuervo: «¡Nunca más!»
«Esa voz,
oh, cuervo, sea
la señal
de la partida,
grité alzándome:--¡Retorna,
vuelve a tu hórrida guarida,
la plutónica ribera de la noche y de la bruma!...
--¡Ahora conmigo![10]--grité, y el váquiro se volvió hacia mÃ.
Cuando llegó el viento, gritó:
--¡Hu-u-u-u!
of_ =gritar=
=gritar= to cry
=gritó= _3 sing.
gritó Iñigo entonces; estaba de Dios
que habÃa de marcharse.
unos bobos,--gritó el tercero con impaciencia.--Voy a enseñar
a Vds.
Al mismo tiempo se oyó desde adentro el portero que
gritó con voz de trueno:--¡Hola!
Entonces gritó:
--Yo soy muy valiente, y desde hoy me llamo Don Juan
Bolondrón Matasiete.
Entonces el oso pequeño probó su silla y gritó:
--¡Alguien se ha sentado en mi silla y la ha hecho pedazos!
Por último el oso pequeño levantó su plato y gritó: 60
--¡Alguien ha probado mi sopa y se la ha tomado!
Al decir esto el empleado, vivo carmÃn tiñó hasta las orejas del galán,
cuya mano no habÃa soltado la damisela, y ésta, dando impaciente patada
en el suelo, gritó:
--¡Bien...
Al buen viejo le parecÃa que habÃa encontrado la
manera de ir a gusto de[90] todo el mundo, cuando un
hombre que pasaba gritó, dirigiéndose[7] al grupo: 5
--¿Cuál de los tres es el asno?
Allà se estarán con ella hasta que
yo güelva.{176-3}
--¡ No, por todos los santos del cielo!--gritó la mujer, que al fin era
madre.--Yo soy muy capaz de cuidarlas, y no quiero que naide más que yo
dé de comer á mis hijos.
Nuevamente el perro volvió á colocarse delante del caballo, tomó carrera
hasta chocar su áspera y fuerte cabeza con los redondos y blandos belfos
de la jaca, que se descompuso, con grave riesgo del jinete.--Pero ¿te
has vuelto loco, Tony?...--gritó el chalán, sacudiéndole un segundo
latigazo más enérgico que el primero.
Pero el Tuerto, á quien el llanto de su padre y el recuerdo de sus hijos
estaban martirizándole el alma, temiendo ceder al cabo al peso de la
aflicción que ya enturbiaba sus ojos, al ver el poco efecto que en el
patrón habÃan hecho las órdenes anteriores,
--¡Larga!--gritó con ruda y tremenda voz, dominando con ella los
alaridos de tierra, y fijando su torva mirada en el viejo marino.
¿Qué gritó?
--Oiga usted--gritó D.
--¿Lo mataron?--nos gritó.
¡Ésa es!--gritó el leñador alegremente.
¡Ola,
posadero!--gritó con voz firme.--Traiga más vino.
(gritó uno.)--¡Pues no quiere su
dinero!{38-1}--Vaya..., vaya...
--¡Posadero!--gritó en voz alta,--tengo mucha hambre y me estoy muriendo
de sed.
--¡Ola!--gritó el forastero, soltando una carcajada que hizo retemblar
las paredes.
40
Entonces gritó la nube:
--Esa roca es más poderosa que yo; quisiera ser roca.
--SÃ--gritó él con precipitación, tendiendo la 5
mano para cogerla.
--Aféiteme Vd.,--gritó el forastero con voz de trueno.--Pero le advierto
que tengo la piel muy delicada.
75
Por último vio su cama el oso pequeño y gritó con voz
aguda:
--¡Alguien ha dormido en mi cama y aquà está!
(gritó _el tÃo Buscabeatas_.) ¡Cuando su huerta,
que es muy mala, le produce poco, se mete á robar en la del vecino!
¡Chepita!--le gritó,--¡saca el candil,
que aquà traigo al ladrón a la rastra![299] ¡Ven a ver, mujer, 10
qué carita pone a la luz del candil!
15
El pastor gritó entonces con mayor fuerza; pero ni
el padre ni sus compañeros dieron crédito a[62] los gritos,
y la fiera concluyó por matar al muchacho que tantas
veces habÃa pedido socorro.
Ellas desde su sobrado le gritaron que no podÃan, porque estaba allà el
_Carlanco_.
--¡à la formación!--gritaron en este acto varias voces.
¡Un miguelete era
_Parrón_...!--gritaron muchas voces.
¿No has gritado que iba por el rÃo abajo una ballena?
El Sol se irrita al ver su poder menospreciado
y grita que se cambiarÃa por la nube.
bruja!--grita al oÃr estas palabras, descompuesta y
febril, la mujer del Tuerto.--¿Yo borracha?
Será a causa de esto que es fácil entender «una ballena,»
cuando se grita, «una va llena,» ¿no le parece?
y yo te voy á abrir en
canal!--grita exasperado el Tuerto al notar la turbación, cada vez más
visible, de su mujer.--à ver el dinero, digo, ¡pronto!
El uno corre de entusiasmo ciego,
La niña arrulla á su muñeca inerme,
Y mientras grita el uno: Fuego, Fuego,
La otra murmura triste: Duerme, Duerme.
De noche en las casas (pues se domestica
fácilmente) y en el campo grita asimismo descompasadamente, apenas
siente algún rumor o advierte una novedad que le causa extrañeza.
El vendedor de
periódicos, rosado y risueño, salta como un gorrión, de tranvÃa en
tranvÃa, y grita al pasajero _¡intanrsooonwoood!_, lo que quiere decir,
si gustáis comprar cualquiera de esos tres diarios, el _Evening
Telegram_, _el Sun_ o el _World_.
Su nuera aparece en el suyo, más
desaliñada que nunca, con la cara roja como un pimiento seco y con la
crin suelta, en medio de una espesÃsima nube de humo, ¡aparición
verdaderamente infernal!; saca medio cuerpo fuera de la balaustrada, y
con voz ronca y destemplada grita, mirando al piso segundo:
--¡TÃa!...
of_ =gastar=
=generosamente= generously
=generoso= noble, generous
=gente= _f._ people
=gobernador= _m._ governor
=golpe= _m._ blow;
=de un golpe= at one blow
=golpear= to strike, hit, hammer
=Gómez= _m._ name of man
=gordo= fat
=gota= _f._ drop
=gracia= _f._ grace;
_pl._ thanks
=gran= _see_ grande
=grande= great, large;
_m._ =grandee=
=gris= gray
=grita= _3 sing.
--Uno me falta,--grita hecho un solimán.
--¡Niñas, por Dios!--grita su madre.--TodavÃa no es tiempo.
--Grita, grita más alto; que te lo oiga el tu marido que por allá abajo
asoma, y mira después onde te metes.
--¿Cómo?--grita la señora.--Un animalito que no pasa de los seis años,
¿va á pagar billete entero, como si fuese una persona mayor?